El Río Ganges, o Madre Gangā como la llamamos con devoción millones de personas en India, es considerada una madre universal, una energía sagrada que ha fluido por siglos como un testigo de la historia de los dioses y los humanos. Ella nace en el corazón de los Himalayas, entre glaciares desciende serpenteando aldeas, templos y ciudades que llevan consigo la promesa de la purificación y el renacimiento espiritual. Al acercarnos a este río reconectamos con algo mucho más grande, vasto y eterno que se siente como un abrazo maternal.

¿Cómo llegó este río tan especial al mundo?

 Según las antiguas escrituras conocidas como “Puranas”, el río Ganges no siempre fluyó sobre la tierra. En los tiempos primordiales Mā Gangā habitan en los cielos, morando entre los dioses, como un río celestial de pureza y luz. Fue el rey Bhagiratha quién movido por un profundo amor y compasión por sus ancestros, emprendió una larga y ardua penitencia para pedirle a los dioses que purificaran las almas atrapadas en el ciclo del sufrimiento. Su devoción fue tan grande que conmovió al mismo Brahma, quién accedió a esta petición. Sin embargo, el poder de la diosa Gangā era tan vasto que si descendía directamente su fuerza, podría haber destruido la Tierra. Entonces intervino el gran Dios Shiva, quien con infinita compasión recibió la corriente sagrada en su chongo, dejando que fluyera suavemente desde sus mechones hasta el mundo de los hombres. Así nació la madre Ganges, en los Himalayas, trayendo consigo las bendiciones del cielo, el perdón de los dioses y la promesa de liberación para todos los seres.

Bañarte en la parte más pura del Río Ganges

Más allá del mito o la tradición, la experiencia de sumergirse en su corriente es inigualable.  La mayor parte de nuestros viajeros han compartido que tan solo al estar en presencia del río algo cambia en ellos. Y es que el murmullo del agua fresca, el aire de la montaña, y la vibración que emana del entorno milenario despiertan una sensación de reverencia difícil de poner en palabras. El río se convierte en un espejo que refleja lo que somos, lo que hemos sido y y lo que estamos dispuestos a soltar para transformarnos en lo que verdaderamente vinimos a ser en esta tierra.

En los Tours espirituales con Ramya y Tariq, tienes la oportunidad única de vivir esta experiencia en su forma más pura. Te llevamos lejos del bullicio de la ciudades y de los lugares saturados, de peregrinos y turistas para guiarte hasta la parte más prístina, limpia y silenciosa del río Ganges. Allí te ves envuelto de montañas, antiquísimas y el agua te conduce a un espacio de paz interior y conexión con la esencia inigualables. Además meditamos en unas cuevas antiguas utilizadas por sabios desde tiempos, inmemoriales. Nosotros acompañamos personalmente a cada viajero en este proceso, ofreciéndoles guía y contención.

Varanasi: en donde todo comienza y todo  termina

 Varanasi es considerada la ciudad más antigua viva desde tiempos antiguos y es un lugar en donde la vida y la muerte danzan en perfecta armonía. Sus ghats (las escalinatas que descienden al río) son testigos de rituales milenarios, cantos, devocionales y fuegos sagrados que nunca se apagan. En sus callejones, el incienso se mezcla con el murmullo de mantras y el sonido de las campanas que marcan el ritmo de lo divino. Pasear por Varanasi es contemplar el misterio de la existencia, sin velos: ver cómo los peregrinos se sumergen en el río, al amanecer para purificar sus almas, cómo los ancianos se sientan frente al agua en silencio, y como a pesar del causa aparente, todo fluye en un orden perfecto. Viajar a Varanasi es viajar en el tiempo: Mā Gangā no solo purifica los cuerpos, sino también la mente y le recuerda a cada visitante que la vida como el río nunca muere, simplemente continúa su viaje hacia el infinito.

con Ramya y Tariq Spiritual Tours, vivir Varanasi se transforma en una experiencia íntima, que va mucho más allá de la mirada apresurada del turista. Nosotros te llevamos a recorrer la ciudad con el corazón abierto, te acompañamos a los Gats al amanecer para que veas al Ganges teñirse de tonos dorados, mientras escuchas un concierto de música clásica, y después hacemos una práctica de yoga junto con hombres y mujeres del pueblo, que lo hacen de manera cotidiana. Participamos en la ceremonia de las luces ( Aarati) bajo el cielo estrellado y nos paseamos por las aguas del río para atestiguar la historia de los templos que han sido construidos a lo largo de los siglos en las orillas del río. Así, Varanasi deja de ser un destino y se convierte en una revelación, un espejo en donde la impermanencia se abraza con la eternidad, y donde cada viajero puede recordar con humildad y asombro, que también él/ella es parte de esa corriente sagrada que todo lo une.

Bienvenido a nuestros próximos tours que incluyen estas experiencias muy distintas entre sí, pero que llevan a la misma paz interior.

Con amor y luz,
Ramya
Guía espiritual – maestra de yoga y meditación